Como toda buena historia, esta también tiene su moraleja: A pesar de los desacuerdos hay que aprender a trabajar en equipo para lograr resolver los obstáculos que se nos presenten. Una lección aplicable a nuestra vida diaria y más concretamente al mundo escolar.
El trabajo en equipo es fundamental a la hora de lograr objetivos, como si de una partido de ajedrez se tratara cada uno tiene un papel que cumplir, todos son necesarios y sin el trabajo y esfuerzo de todos es difícil alcanzar las metas de forma eficaz. Compromiso, voluntad o estrategia son alguno de los factores de éxito del trabajo en equipo, pero no debemos olvidarnos del respeto y comprensión. A priori parecen términos que distan mucho de la estrategia, pero un buen clima es fundamental, hay que tener en cuenta a los demás y aceptar sus diferencias de manera que se produzcan mejores resultados.
Como les ocurre a nuestros protagonistas, las peleas y las discusiones no llevan a ningún sitio, no es hasta el final cuando descubrimos que con la ayuda de los demás llegamos más lejos. Hay que mirar desde una perspectiva de cooperación.
Fuente: http://welearncoaching.com/